El coloreado digital
Supongamos que has tenido una idea y tras unos cuantos bocetos y borradores has elaborado la primera página de tu novela gráfica. Si no piensas en dejarla en blanco y negro, debes colorearla. Antes, el dibujante lo dejaba en manos de los coloreadores profesionales que utilizaban los rotuladores y pinceles. Hoy los paquetes de software facilitan enormemente esta tarea. Arriba se muestran sendos videotutoriales donde puedes ver el proceso que se debe seguir, pero antes algunos consejos, que, si ya has trabajado con GIMP o Photoshop, te serán familiares.
- Al colorear digitalmente es importante tener en cuenta si el material está destinado a ser colgado directamente en la red o a la imprenta para reproducir en papel, para lo cual tenemos que trabajar en modo CMYK. Recuerda lo que viste el pasado curso sobre los sistemas de color en GIMP, en concreto en los subapartados "Arte gráficas y digitales" y "Experimenta con GIMP" de Tema 4 de la Unidad 4 Color y textura en el arte.
- El coloreado digital se realiza a base de capas, manteniendo el trazo en negro original en una capa y aplicando el color en las capas siguientes. Las capas incrementan el tamaño del archivo pero te permiten controlar el proceso en todo momento y retroceder a un estado anterior cuando se estime necesario.
- Una vez abierto tu dibujo, transforma las áreas en blanco en trasparentes y el negro en un negro "sólido (100% k en el modo de color CMYK).
- Muchos coloreadores trabajan rellenando de colores planos las áreas de color, después seleccionan estas áreas y las modifican mediante diferentes capas de colores más diluidos o semitrasparentes, creando modulaciones, luces y sombras. Finalmente, combinan con la capa negra del trazado original. En los tutoriales de arriba puedes observar este proceso.
- Aparte de los pinceles, los buenos editores gráficos como Photoshop o GIMP disponen de otras herramientas muy útiles al dibujante de cómic como el lazo y la varita mágica , que permiten seleccionar áreas concretas del dibujo para trabajar en ellas por separado. La herramienta gradación te permite hacer degradados entre colores, ideal para cielos o fondos. Con el bote de pintura pueden rellenarse de color o patrones de texturas las áreas seleccionadas. Y también es útil la herramienta gotero que sirve para tomar muestras de color de un área para utilizar exactamente el mismo en otra o el tampón de clonar , si queremos copiar una parte de la imagen en otra. Finalmente, también existen muchos filtros, pinceles y efectos disponibles que pueden añadirse al programa mediante distintos plug-ins que pueden conseguirse por internet. Pero en fin, no hace falta que saques todos los juguetes del baúl al mismo tiempo. Poco a poco. La necesidad te lo va a ir pidiendo. En esta web tienes una descripción detallada de la caja de herramientas y sus principales aplicaciones.
El guardado del trabajo
Cuando se está haciendo un proyecto digital es muy importante guardar sistemáticamente el trabajo cada poco tiempo. Esto puede automatizarse en la ventana de preferencias. Esta opción evita la desagradable sorpresa de perder todo el trabajo en caso de que el ordenador se cuelgue o estropee, que suele pasar cuando se consume mucha memoria y recursos.
El dibujante debe guardar siempre una copia de seguridad en el formato nativo del programa que esté utilizando (psd en el caso de photoshop o xcf en el caso de GIMP). De esta forma se conservan todas las capas originales del proyecto. Si se guardan en cualquier otro formato (tiff o jpg) las capas de acoplan o aplanan en una sola. Para impresión lo habitual es enviarlo en formato TIFF que, traducido del inglés significa que es un Formato de Fichero de Imagen con Etiquetas que reconoce todos los tipos de colores y retiene todos los datos de la imagen original, por lo que suele ser un fichero muy pesado. Pero si lo que se quiere es colgar el trabajo en internet lo mejor es hacerlo con formatos más ligeros como GIF o JPG. Ambos formatos tienen pérdidas de calidad. El GIF es especialmente recomendado para imágenes en blanco y negro o colores planos.
Otro formato útil, ligero y cómodo para transferir archivos es el PDF. Los archivo pdf pueden generarse a partir de diversas aplicaciones y contiene por igual textos, dibujos e imágenes. Una de sus ventajas es que es un formato de partida "no editable" y se puede bloqquear para su copia o impresión. Lo archivos pdf se leen con programas de Acrobat o Reader, generalmente gratuitos por lo que es un formato que se ha estandarizado que cualquiera puede generar o leer, idela para compartir en la web.
La publicación
Una vez tengas ultimado tu proyecto de novela gráfica, tienes dos opciones: la vía editorial y la vía web.
En el primer caso, debes contactar con una casa editorial especializada (Astiberri, por ejemplo) que se preste a publicar en papel tu novela. La calidad y el formato final dependerá del presupuesto y de la solvencia de la casa editorial. Normalmente, las novelas gráficas, por sus componentes visuales y artísticos, se caracterizan por una cuidada edición y diseño. Esto implica que suelen ser más caras que un libro tradicional.
En el segundo caso, publicar en la web, puede ser un trampolín para dar a conocer tu proyecto y que se interesen por él algunas editoriales. Otra opción es publicar por capítulos en un blog o página propia, como por ejemplo Moowiloo o El cielo está enladrillado. O también, colocar en librerías virtuales para su venta online. Hay sitios web especializados en Novelas gráficas como 68 revoluciones.
En el apartado Aula taller tienes un cómic que te explica paso a paso cómo crear un "webcómic": del papel a la pantalla.
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