2.3. El Gótico
Notre Dame de París
Fotografía de Peter Hass en Wikimedia Commons. Licencia CC
A finales del siglo XII nace en Francia un nuevo estilo artístico, el Gótico, su desarrollo durará hasta el siglo XV. Su expansión y desarrollo por Europa no será igual, En España e Inglaterra será aceptado rápidamente, en Alemania se asimilará más tarde y en Italia prácticamente no se impondrá (salvo en el norte).
La transformación en el arte y sobre todo en la arquitectura será radical, nuevas necesidades requieren soluciones técnicas distintas a las empleadas hasta ahora.
En la imagen superior, Notre Dame en París, arquetipo de catedral de gótica, se empezó a construir en el siglo XII y se finalizó en el XIV. En este enlace puedes obtener información sobre este magnífico edificio gótico.
Una nueva sociedad
A finales del siglo XII la sociedad medieval está cambiando, debido a:
- La evolución del pensamiento teológico: se traduce a Aristóteles.
- La nueva situación económica: las cruzadas abren nuevas rutas al comercio, por tanto, los esquemas laborales y técnicos cambian. Aparece la industria artesanal.
- Los cambios sociales: una nueva clase social, la burguesía (del burgo, ciudad) reemplaza en la hegemonía social y política a la feudal y monacal románica. Los monasterios rurales pierden poder en favor de las Catedrales de la ciudad.
- La reforma cisterciense. San Bernardo comienza una reforma mediante la cual la arquitectura se limita a sus elementos estructurales y se prohíbe toda decoración, lo que permite a los arquitectos ocuparse exclusivamente de las cuestiones técnicas. Es el origen de la ingeniería arquitectónica.
- El Humanismo. San Francisco de Asís (siglo XIII) transmite una nueva dimensión del hombre, es el nacimiento de una nueva era: el amor espiritual y el amor cortesano.
Una nueva arquitectura
La expresión máxima del arte gótico la encontramos en su arquitectura, es un periodo en el que se desarrolla la ingeniería constructiva.
Los problemas de tensiones dinámicas que plantean el tamaño y altura de los edificios quedan solucionados gracias a los avances técnicos, que además permiten crear un nuevo lenguaje expresivo.
Como ocurrió en la antigüedad clásica, se concibe al edificio como la plasmación de una idea: luz y elevación como el culmen de una nueva espiritualidad, esto es, la catedral gótica.
Las características más destacadas de la arquitectura gótica son:
- El uso del arco apuntado y la bóveda ojival que permiten desviar y concentrar los empujes.
- La decoración cambia de manera radical, se abandona la abstracción geométrica del románico y se sustituye por elementos vegetales.
- Los pilares sufren una modificación sustancial, aparecen columnas adosadas, los capiteles desaparecen y las bases se disponen a distintas alturas.
- Los muros prácticamente desaparecen y son sustituidos por un nuevo elementos decorativo las vidrieras o vitrales.
Rosetón de la Saint Chapelle de París
Fotografía de Didier B en Wikimedia Commons. Licencia CC
Los vitrales
El uso de la geometría lo podemos apreciar en las vidrieras. La nueva estructura arquitectónica busca ante todo iluminar el espacio interior. los huecos de los muros se rellena de vidrieras compuestas de pequeños fragmentos de vidrios coloreados, sujetos mediante un armazón de estructura geométrica compuesta por arcos tangentes y cuadriláteros.
En la imagen superior puede ver un detalle de la Sainte Chapelle de París, una pequeña capilla en la cual los muros han desaparecido, en favor del vidrio y la luz.
Leonardo de Pisa "Fibonacci"
Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público
Leonardo de Pisa (1180-1250)
Matemático italiano conocido como Fibonacci, estudió un tipo de problemas que originaban una sucesión de números en la que cada término, salvo el primero, es la suma de los dos anteriores: 1, 1, 2, 3 5, 8, 13, 21, ..
Esta sucesión, que relaciona los pentágonos regulares y los estrellados, es un modelo matemático que permite describir fenómenos naturales, como la disposición en doble espiral (a la izquierda y a la derecha) de las semillas de un girasol, o la pauta de crecimeinto del Nautilus pompilus.
Importante
Al desaparecer los muros la pintura se traslada a un nuevo soporte la tabla, nace el retablo.
Los elementos de la pintura gótica se disponen en un espacio real, se abandona el uso de fondos abstractos sustituyéndolos por paisaje y perspectivas.
El uso de la técnica del temple permite la realización de pinturas más definidas y de mayor detalle, lo que favorece el trazado de perspectivas muy precisas.
Giotto: Leyenda de San Francisco
Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público
Giotto (1266-1337)
Mediante una técnica muy depurada consiguió plasmar en sus pinturas la tridimensionalidad, no solamente por el uso del claroscuro, sino por la aplicación de criterios perceptivos próximos a la axonometría, o a la perspectiva cónica.
En la imagen superior tienes uno de los frescos de la vida de San Francisco de Asís, los edificios están representados según la perspectiva axonométrica oblicua (caballera).
Para saber más
Cubiertas de la Catedral de Sevilla
Fotografía de Tim Adams en Wikimedia Commons. Licencia CC
Una de las características más destacadas de la arquitectura gótica es la aplicación de las estructuras naturales en la ordenación interna de los edificios. La observación de animales y plantas sugiere a los arquitectos góticos la creación de nuevos elementos arquitectónicos, como por ejemplo los arbotantes y contrafuertes.
En la imagen superior puedes ver arbotantes y contrafuertes de la catedral de Sevilla.
Curiosidad
El Duomo de Milán
A pesar de que su construcción duró casi seis siglos, en ella perduró el estilo original: el gótico tardío.
Su construcción comenzó en el año 1386, por encargo del arzobispo Antonio da Saluzzo, pero en 1391 los arquitectos italianos y franceses que intervenían en su realización aunque coincidían en la necesidad de que el edificio tuviera estructura geométrica; no coincidían en la forma que debía tener la planta: cuadrado o triángulo equilátero. Además discrepaban en la necesidad de usar cánones geométricos, los franceses opinaban que debía establecerse un canon; mientras que los italiano se oponían pues decían que no era necesario ya que no se debía mezclar ciencia y arte.
El duomo de Milán se considera oficialmente acabado en el año 1965, tras colocar la última de las agujas y vidrieras, aunque en el año 2008 se realizaron trabajos de renovación en la fachada principal.
Para saber más
Palacio de Westminster
Fotografía de Tony Moorey en Wikimedia Commons. Licencia CC
La apreciación del arte gótico no ha sido la misma a lo largo de la historia, de hecho el término tiene un sentido peyorativo, los tratadistas del Renacimiento lo usaron para referirse a la arquitectura de la Edad Media como la propia de los bárbaros (godos), confusa y desordenada, frente a la perfección y racionalidad clásica del nuevo arte renacentista.
Por contra, en España durante el siglo XVI se pensaba que la arquitectura gótica era innovadora; frente al nuevo estilo renacentista que era vista como algo antiguo, por su semejanza a lo clásico.
Durante el siglo XIX los movimientos historicistas y románticos revalorizaron el arte gótico, como una continuación del románico. Así en Inglaterra, se crea el neogótico, como el arte heredero del estilo gótico de la Edad Media.
En la imagen superior tienes el ejemplo más característico de este nuevo estilo: el parlamento de Londres y la famosa torre del Big Ben.