1. No es lo mismo sentir que percibir
Introducción
Percibir es registrar en nuestro cerebro cualquier información externa pero es nuestro cerebro el que filtra, simplifica y elabora dicha información. La percepción es la forma en que nos relacionamos con nuestro entorno y descubrimos qué es lo que sucede fuera de nuestro cuerpo y de nuestro cerebro.
Se podría decir que el estímulo que desencadena el fenómeno pertenece al mundo exterior pero la percepción pertenece a nuestro mundo individual. Estamos percibiendo cuando tocamos un objeto, olemos una fragancia, oímos una melodía, saboreamos un alimento o cuando miramos una obra de arte, por ejemplo.
Para saber más acerca de cómo percibimos con nuestros sentidos pincha en la siguiente fotografía:
Actividad
Las sensaciones son las experiencias inmediatas básicas que producen los estímulos sensoriales, como por ejemplo un sonido, una longitud de onda, una textura, etc. Se podría decir que es la recepción de un estímulo a través de nuestros órganos sensoriales: los ojos, los oídos, la nariz, la lengua y la piel.
La
percepción es, sin embargo, la interpretación que de esas sensaciones realiza nuestro cerebro, dándoles
significado y organización.
La sensación se produce, pues, antes que la percepción, por ejemplo cuando escuchas una nota musical, su tono y su volumen son sensaciones, sin embargo, si escuchas varias notas y reconoces de qué canción se trata tu cerebro está percibiendo puesto que ha interpretado y reconocido a qué tema pertenecen dichas notas.
Recuerda: la percepción, implica la actividad no sólo de nuestros órganos sensoriales, sino también de nuestro cerebro.